Todo este tiempo, sin dar un pedal porque encima la espalda hizo de las suyas y pasé una mala racha, que ni con la bici de carretera pude salir nada de nada.
Habíamos planeado ir este fin de semana al pueblo con algunos amigos de El Casar, para hacer una ruta por allí ya que ellos no habían rodado por aquella zona y tenían ganas.
Gracias a otro de ellos que no pudo venir, pero que me dejó su bici, pude hacer la ruta con ellos y así disfrutar todos juntos.
Hicimos una de las clásicas de la zona, que hacemos Isabel y yo a menudo cuando estamos por allí. Salimos de Villarta, hasta Arenas, y de ahí subimos a Puerto Lápice. Nos decidimos a subir a sus molinos, casi la mitad de la subida la tuvimos que hacer "a pata" porque tiene mucha pendiente, mucha piedra, etc... Pero una vez arriba, merece la pena por las vistas.
La bajada se hace por una pista asfaltada, y una vez abajo nos detuvimos en la plaza para tomar un refrigerio. Y de ahí solo queda bajar en linea recta hasta Villarta nuevamente.
La verdad que para llevar tanto tiempo sin hacer ejercicio, no me encontré mal del todo, y me animé un poquito, deseando que llegara pronto mi bici para poder hacer nuestro viaje en vacaciones. Que incertidumbre, no saber si llegaría a tiempo o no.
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