domingo, 26 de febrero de 2017

25/02/2017 PASEO POR EL PARDO

Ayer Sábado me tocaba librar en el trabajo, por lo que aproveché a salir con la bici.
En un principio había pensado hacer el anillo ciclista, saliendo desde Alcobendas, salían unos 60 km (haciendo la versión corta). Pero lo comenté en el grupo del Club, por si se animaba alguien a salir conmigo, y un compañero, Luis, me dijo que aprovechando que iba a hacer buen tiempo y que ya no había barro, si me apetecía acompañarle por El Pardo. Por lo que acepté, ya lo intentaré hacer otro día que efectivamente haya llovido y no se pueda rodar por caminos.

Quedamos a las 9:15 en el último parking de El Pardo, un poquito antes de llegar al cementerio.
Luis se conoce la zona de maravilla, durante toda la ruta me explicó todo a la perfección. Cuando se aproximaba algún tramo un poco más complicado, se paraba con antelación para advertirme y aconsejarme en todo momento. La verdad, que es una gran compañía. Gracias Luis!


Llevaba sin hacer ejercicio desde la anterior marcha, la del Cocido, porque al final tuvo que pasar la bici por el taller y el pasado fin de semana no la tenía, por lo que descansé. Y entre semana tampoco pude hacer nada, porque el Martes por fin me sacaron la muela que me llevaba molestando un tiempo, y tuve que tener reposo, así que tenía muchas ganas, pero debe ser que pocas fuerzas.
En la primera cuesta me tuve que bajar de la bici, llegué arriba hasta mareado, con las piernas super pesadas, como si me tiraran para abajo. Tuvimos que parar un rato, porque el mareo no cesaba y me empezó a entrar mal cuerpo. Vamos, una pájara en toda regla. Definitivamente, no estoy en racha.
Y no se si también influyó que he empezado una dieta, y al principio el cuerpo está flojo hasta que se acostumbra a comer menos.
  

Agradecer a Luis su paciencia infinita, y sus ánimos, ya que poco a poco conseguí entonarme un poquito y al final pudimos hacer la ruta planificada, quitando una subida y una bajada, porque no iba a aguantar una más.


La ruta sensacional, todo por senderos, subidas explosivas, bajadas de infarto. Muy divertida, la pena que no la pude disfrutar al 100%. Hay que volver para realizarla completa y disfrutarla a tope.


Llegamos hasta el Mirador de Valpalomero, donde las vistas son espectaculares.


Y una vez abajo nuevamente, fuimos dirección al chorro de la presa. El camino para llegar a él va paralelo al rio, y al principio es super chulo, estrechito, con muchos zig zag, entre árboles.
Lo que pasa que como el buen tiempo acompañaba, estaba algo masificado de gente, con bici, paseando, niños, perros... Todos disfrutando del buen día que hacía.
  

Al llegar al chorro, la vuelta se realiza por el mismo camino, y luego cogimos una pista paralela al otro lado del rio, donde me dió otro pequeño arrechucho, pero por suerte estábamos muy cerca de llegar al parking donde teníamos el coche.
  

El mal cuerpo no se me pasó en toda la mañana. Pero al llegar a casa, ducharme, comer y echarme un rato la siesta, parece que ya me entoné y por la tarde ya me encontraba bien.
Pues este ha sido el resumen de la ruta del fin de semana, os dejo también los datos de Strava.
Espero levantar cabeza pronto!
Saludos


miércoles, 15 de febrero de 2017

12/02/2017 MARCHA DEL COCIDO (QUIJORNA)

Hola a todos, aquí estoy otra vez. Hoy os voy a contar como fué la Marcha del Cocido, celebrada el pasado Domingo en Quijorna.
Llevaba dos días sin parar de llover, incluso el mismo día cuando nos levantamos estaba cayendo la del pulpo, pero eso no me echó para atrás y allá que fuimos.
En esta ocasión, mi compañera de fatigas fué Marisa, una compañera del Club Mirabike, que está hecha una máquina. Es una valiente y me alegró mucho su compañía.
Aquí os dejo una foto del antes, tirada por mi mujer Isabel, que como siempre nos acompañó para animar y ayudar en todo lo posible.


Había dos recorridos, uno de 50 km que la salida era a las 10 de la mañana, y el que realizamos nosotros, de 30 km, con salida a las 10:30
Justo cuando empezamos había parado de llover, así que tan contentos comenzamos!!


Duró poco la alegría y enseguida comenzaron a caer gotas nuevamente, con ratos en los que caían con fuerza y con un viento en contra que hacía la cosa mucho más complicada. Porque barro no hace falta que os diga que había, porque fué terrorífico. La bici se iba para todos los lados, se quedaba enganchada en el barro. En varias ocasiones tuvimos que parar para quitar el barro acumulado en las ruedas, ya que chocaba en la horquilla delantera y no podíamos avanzar.
Os dejo unas fotos, que la organización ha colgado hoy mismo en su página web.





Cabe destacar la buena organización de la ruta, que en un día tan complicado, no falló en nada. Todo el recorrido muy bien señalizado, en varios cruces protección civil y voluntarios cortando el tráfico a nuestro paso, y el avituallamiento muy completo también.

Y dentro de lo que cabe, no íbamos mal. Los dos tenemos el mismo nivel, vamos al mismo ritmo más o menos, y pudimos disfrutar de la situación, hasta que se torció la cosa.
El cambio me dejó de funcionar, no podía cambiar de plato, y los piñones solo podía con los más grandes, con lo que en cuanto venía alguna cuesta más pronunciada, me era incapaz subirla montado en la bicicleta. Por lo que en el kilómetro 20 que estaba el avituallamiento, me tuve que quedar.
Me era imposible continuar, y más con el miedo de romper el cambio totalmente.


Marisa como una campeona, continuó hasta el final y lo consiguió, no cabe ninguna duda.
Allí estábamos Isabel y yo en linea de meta esperándola para darle ese aplauso más que merecido.

Y como el propio nombre de la marcha lo indica, nos esperaba ésto al finalizar.


La verdad que yo acabé nuevamente desmotivado. Parece que este año todo está en contra mía y no consigo acabar ninguna marcha, por unas cosas y por otras. Bueno si, la anterior de Valdemorillo si lo conseguí, y con muy buenas sensaciones. Pero la primera de este año, el Maratón Sierra Oeste, por la caída tuve que abandonar. Y el fin de semana pasado, que era la Ruta de la Miel, no pude acudir por el gripazo que tenía encima. Y ésta por avería mecánica tampoco.
Espero que mi mala racha termine ya, porque al final voy a pensar que abrir el blog me ha dado mala suerte.

Ahora vienen 2 Domingos sin marchas, por lo que esperaré a ver si el Club organiza alguna salida y sino pues saldré por mi cuenta, ya que no puedo parar de montar, porque ahora viene lo gordo.........

Hasta la próxima y gracias por leerme.

Sergio




miércoles, 1 de febrero de 2017

29/01/2017 CLÁSICA DE VALDEMORILLO

Habían pasado 2 semanas de mi caída en la anterior marcha y todavía quedaba alguna pequeña molestia en el pecho por el golpe. Tuve que ir al médico finalmente por el dolor y me confirmaron la contusión torácica, así que estos 15 días he estado en reposo de ejercicio y medicado.
Por suerte, las molestias eran mínimas y me animé finalmente a acudir a Valdemorillo a disfrutar de su marcha, perteneciente al circuito 4 estaciones. 
En esta ocasión me volvía a acompañar mi amigo Tomás y también se nos unió otro más, Fran. Aquí nos veís a los 3 preparados para empezar.


El día estaba bastante nublado y caían algunas gotas cuando llegamos allí, pero tuvimos suerte porque durante la marcha no nos llovió y frío tampoco pasé. Un día fantástico para montar en bici!! Eso si, charcos nos íbamos a encontrar todos los que quisimos y más. La salida fué a las 11 de la mañana, bien porque no tuvimos que madrugar en exceso.

Allá vamos!! Bonitas vistas con la sierra nevada al fondo.


Fueron 35 km, combinando pistas y senderos, tramos con bastantes piedras, alguna que otra subida que te hace sudar en condiciones, bajadas divertidas, y charcos, barro y más charcos y más barro. Había momentos que era complicado controlar la bici, porque se iba para todos los lados.
A lo largo del recorrido tuvimos dos avituallamientos en los que no faltaba de nada, fruta, frutos secos, barritas y geles energéticos, agua, bebida isotónica, etc... Fenomenal!
Y también había fotógrafos de la revista Bike, y aquí me teneís todo sonriente.


Sonriente, hasta que llegó la gran cuesta del Mortirolo, que me tuve que acabar bajando de la bici porque entre la gran pendiente que tiene y todo tan embarrado, me resultó imposible subirla montado en la bici.
Tras tres horas rodando, llegué a la meta donde nos esperaba un caldo calentito, un pincho de tortilla y lo mismo que había en los avituallamientos del recorrido.
La experiencia fué muy buena, la organización de 10 y la compañía inmejorable, como siempre apoyándome ya que soy el mas flojo de los 3.




He tenido un problema con el móvil estas 2 últimas semanas, y no he podido grabar las 2 primeras marchas del año con Strava, pero las siguientes, las tendréis!

En resumen, me fuí de allí bastante contento, por haber podido acabarla.
Hasta la próxima!